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22 mayo 2006
Mucho se ha hablado, con los nuevos estatutos de autonomía, de la posibilidad de una balcanización de España, es decir, de la posibilidad de una disgregación de este país en una serie de estados, como ocurrió en la ahora ex-Yugoslavia. Aunque no siempre ha sido así, el termino balcanización lleva implícitas violencia y guerra civil, al ser principalmente el resultado de la guerra de Yugoslavia
El último episodio de esta balcanización nos lo encontramos hoy con la más que posible separación de Montenegro de Serbia. Lo que hasta hace poco era "Serbia y Montenegro" (curioso nombre para un país) pronto será dos paises, aunque esta vez haya sido pacificamente, mediante un referendum en el que el sí ha obtenido una ajustada victoria, un 55,4%, 4 decimas por encima del mínimo que marca la UE para la separación de un estado por esta vía
Ahora la pregunta es si hay una opción de que ocurra lo mismo en España. Aunque Solana cree que no, habría que mirar un poco más a fondo para estar tan seguro.
En primer lugar, el caso de pasar por una guerra civil parece complicado. El fantasma de las "dos españas" parece por fin enterrado. La democracia lleva 30 años y parece que está consolidada. El estado de bienestar está más que instaurado y no existen grandes desigualdades sociales. No parece que los problemas políticos con los nacionalismos periféricos vayan a dar lugar a un alzamiento militar para defender a España, ni que si este se produjera fuera a triunfar.
Pero en el caso de una separación basada en trámites democráticos no se puede decir lo mismo. Las modificaciones a las autonomías, las posibles reformas constitucionales y el fin de ETA, con las consecuentes contrapartidas, podrían situar el escenario democrático español al borde de un abismo. Aunque todavía lejos de caer, un posible traspiés podría dar lugar a un efecto avalancha de difícil solución. Cualquier posible opción será tomada más que en cuenta por los grupos nacionalistas (no olvidemos que tienen mucho poder) y es posible que algún día nos encontremos ante un referendum de una parte de España para decidir si quieren o no separarse del resto. El resultado de este ya es de más difícil previsión. Primero porque la población que se siente nacionalista y que quiere dar ese paso no se si llega al mínimo exigido. Segundo porque aunque sentimentalmente pueden sentirse muy bien siendo independientes, no está claro el futuro de éstas regiones fuera de España. La economía se resentiría (por mucho que se empeñen en decir que aportan más que reciben) al basarse una gran parte de ésta en exportaciones a la propia España (el boicot al cava quedaría en algo ínfimo) y por el cambio de estatus (los gastos administrativos serían muy grandes), en principio no podrían formar parte de la UE, con todo lo que esto significa, y está por ver la estabilidad de un nuevo país escindido tras tantos años de pertenecer a otro. Y tercero por lo díficil de plantear en cuanto a qué territorios entrarían en ese proceso (Euskadi con o sin Navarra, Cataluña sóla o sumándole Valencia o Baleares, etc)
En fín, que aunque es posible que en España se llegue algún día a la posibildad de disgregación (aunque no balcanización), hoy por hoy considero que es difícil que se de el caso. Es más probable un nuevo estado federal o incluso (y es muy difícil también, aunque no tanto) una posible república federal
Relacionado: Este post tuvo su último empujón tras leer Balcanización en La vaca sueca
El último episodio de esta balcanización nos lo encontramos hoy con la más que posible separación de Montenegro de Serbia. Lo que hasta hace poco era "Serbia y Montenegro" (curioso nombre para un país) pronto será dos paises, aunque esta vez haya sido pacificamente, mediante un referendum en el que el sí ha obtenido una ajustada victoria, un 55,4%, 4 decimas por encima del mínimo que marca la UE para la separación de un estado por esta vía
Ahora la pregunta es si hay una opción de que ocurra lo mismo en España. Aunque Solana cree que no, habría que mirar un poco más a fondo para estar tan seguro.
En primer lugar, el caso de pasar por una guerra civil parece complicado. El fantasma de las "dos españas" parece por fin enterrado. La democracia lleva 30 años y parece que está consolidada. El estado de bienestar está más que instaurado y no existen grandes desigualdades sociales. No parece que los problemas políticos con los nacionalismos periféricos vayan a dar lugar a un alzamiento militar para defender a España, ni que si este se produjera fuera a triunfar.
Pero en el caso de una separación basada en trámites democráticos no se puede decir lo mismo. Las modificaciones a las autonomías, las posibles reformas constitucionales y el fin de ETA, con las consecuentes contrapartidas, podrían situar el escenario democrático español al borde de un abismo. Aunque todavía lejos de caer, un posible traspiés podría dar lugar a un efecto avalancha de difícil solución. Cualquier posible opción será tomada más que en cuenta por los grupos nacionalistas (no olvidemos que tienen mucho poder) y es posible que algún día nos encontremos ante un referendum de una parte de España para decidir si quieren o no separarse del resto. El resultado de este ya es de más difícil previsión. Primero porque la población que se siente nacionalista y que quiere dar ese paso no se si llega al mínimo exigido. Segundo porque aunque sentimentalmente pueden sentirse muy bien siendo independientes, no está claro el futuro de éstas regiones fuera de España. La economía se resentiría (por mucho que se empeñen en decir que aportan más que reciben) al basarse una gran parte de ésta en exportaciones a la propia España (el boicot al cava quedaría en algo ínfimo) y por el cambio de estatus (los gastos administrativos serían muy grandes), en principio no podrían formar parte de la UE, con todo lo que esto significa, y está por ver la estabilidad de un nuevo país escindido tras tantos años de pertenecer a otro. Y tercero por lo díficil de plantear en cuanto a qué territorios entrarían en ese proceso (Euskadi con o sin Navarra, Cataluña sóla o sumándole Valencia o Baleares, etc)
En fín, que aunque es posible que en España se llegue algún día a la posibildad de disgregación (aunque no balcanización), hoy por hoy considero que es difícil que se de el caso. Es más probable un nuevo estado federal o incluso (y es muy difícil también, aunque no tanto) una posible república federal
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"No parece que los problemas políticos con los nacionalismos periféricos vayan a dar lugar a un alzamiento militar para defender a España, ni que si este se produjera fuera a triunfar." Me gustaría pensar eso, pero cuando las declaraciones de Mena hubo quienes pensaron que no estaba nada equivocado, como por ejemplo la AME
Vamos que hay quien puede pensar que un alzamiento militar es la única posibilidad para "salvar a España".
Yo personalmente, si sirviera para que ETA no matara, y siempre que no sea con el el Plan Ibarretxe, donde se podía decir de España aquello de "encima de puta pone la cama", por mí les daba la independencia ya de ya... Eso sí que no me vengan con tonterías de sólo los vascos votamos en el referendum...
Supongo que un futuro podría ser el de una república federal.
Pues yo creo que tu análisis es acertado en lo de que puede tener inconvenientes tanto para unos como para otros, pero creo que si se separaran entrarían automáticamente en la UE, eso seguro. No se separarían sin esa condición y cumplen con los requisitos (¡incluso tienen euros! Sería un error de la UE que porque una región se separe de su Estado sacarle del sistema monetario si es una región rica que cumple mejor que otros países los criterios económicos).
Lo que yo no creo es que todos los nacionalistas votaran por la independencia. Y por eso, en el País Vasco que hay un 50-50 de nacionalistas frente a no nacionalistas no creo que ganara un referendum de independencia. Y en Cataluña creo que tampoco.
En principio, si un pais se separa de otro miembro no entra a formar parte de la UE si el estado madre no lo admite. Es decir, el simple hecho de haber pertenecido a la UE no da derecho a seguir pertenenciendo, y tendria que solicitar una nueva adhesión (con la posibilidad de veto por parte del estado al que pertenecia)
En cuanto al sistema monetario, no lo tengo tan claro. El propio montenegro ha adoptado el euro como moneda, aunque no creo que haya entrado en el sistema monetario europeo simplemente por eso. Asi que imagino que los nuevos paises podrían seguir usando el euro.