Al anunciar el alto el fuego, ETA
nos dió esperanzas, aunque tampoco muchas. Pocos meses después
el gobierno empredió el diálogo que podía llevarnos, por fin, al fin de ésta lacra. Sin embargo, a finales del año pasado,
ETA destrozó todas las esperanzas, y de paso la vida de dos hombres, en el atentado del aeropuerto.
Sin embargo, contra toda lógica (ellos siempre actúan con "su" lógica) ETA seguía afirmando que la negociación seguía viva, que todavía se podía llegar al final de la violencia, si se daban los pasos adecuados. Pero anoche cambiaron otra vez de parecer y
han anunciado la vuelta a las andadas.
¿A dónde quieren llegar? ¿En base a qué justifican el retorno a las armas? En Euskadi, una de las regiones con más autonomía del mundo, el único fascismo lo ejercen ellos; la falta de libertad la crean sus capuchas y sus bombas y la opresión de la minoría, que lo es en cuanto a fuerza porque sólo usa armas legítimas, la da el miedo que ellos acrecientan y se encargan de alimentar. No es concebible en nuestra sociedad en el siglo XXI el intento de conseguir nada mediante la fuerza, y menos el intento de legitimar esa violencia en un discurso que, por mucho que se repita, nunca será creible ni ganará razón.
Ahora volvemos al miedo, a odiar las multitudes, los edificios importantes y los sitios donde haya militares; a mirar debajo del coche; a dar vueltas para no repetir los mismos caminos. Volverán a morir inocentes (todos, menos ellos, lo somos) y a llorar lágrimas de incomprensíón madres y padres, hermanos y mujeres.
Sin embargo, el PP debe estar contento. Ha conseguido demostrar que ETA no quería negociar, que los terroristas iban a volver a las armas y que la negociación no sirve para nada. ¿Realmente? Yo creo que no. Lo que han conseguido es crear la crispación necesaria para que la negociación no fuera viable, dar credito a todos los comunicados de ETA hablando de negociación, hacer creer que el PSOE iba a romper España, vender Navarra, soltar a los presos y permitir a HB volver a las instituciones. Por supuesto ninguna de estas acciones se ha llevado a cabo, por lo que el resultado final de la operación del PP ha sido debilitar al gobierno y a las instituciones frente al terrorismo e impedir, quizá para siempre, un futuro final dialogado de la violencia. Pero sin duda, del
éxito del que más orgullosos deben estar en Génova, es de haber conseguido que Zapatero no pase a la historia como el presidente que derrotó a ETA, porque a Rajoy le habría costado, casi seguro las próximas elecciones.
Así, se puede ver que para el PP ha primado volver al poder sobre acabar con el miedo, de la misma forma que intenta conseguir que la mentira prevalezca sobre la verdad en el juicio del 11-M. Y lo peor es que esta estrategia no le ha ido mal, sino que ha conseguido fidelizar a su electorado, sembrar la duda en el resto y crispar la situación, hasta el punto de que la situación es idónea para que ellos venzan (que no convenzan) en las próximas generales.
A los que volvemos a tener miedo no nos queda otra:
¡Basta ya!Etiquetas: España, Politica, Terrorismo